La Loma Grande

El Barrio de la Loma Grande en el Centro Histórico de Quito es un crisol de historia y tradición que se remonta a siglos atrás. Al adentrarnos en sus calles empedradas y callejones estrechos, nos sumergimos en un mundo donde el pasado y el presente se entrelazan en una compleja red de relatos y vivencias.

La historia de la Loma Grande se despliega en capas, cada una revelando aspectos distintos de su evolución a lo largo del tiempo. Se dice que sus orígenes se remontan a la época incaica, cuando esta elevación geográfica podría haber servido como un punto estratégico de vigilancia y observación. Sin embargo, la llegada de los españoles y la posterior fundación de Quito en el siglo XVI marcaron el inicio de una nueva era para este lugar.

Durante la época colonial, la Loma Grande comenzó a tomar forma, siendo parte integral del crecimiento y desarrollo de la ciudad. La Calle Larga, como se conocía entonces a lo que ahora es la calle Rocafuerte, se convirtió en un eje vital que conectaba diferentes partes del centro histórico. En su extremo oriental se encontraba la Mama Cuchara, una plazoleta que se convirtió en un punto de referencia emblemático para los habitantes del barrio.

Con el tiempo, la Loma Grande se pobló de manera gradual, acogiendo a una diversidad de habitantes que incluían indígenas, blancos y mestizos. La vida en el barrio se organizaba en torno a actividades comerciales y sociales, con la aparición de chicherías y estancos que animaban las noches con música y entretenimiento. Personalidades históricas como Alexander Von Humboldt dejaron su huella en estas calles, añadiendo capas adicionales a la rica historia del barrio.

Durante el siglo XX, la Loma Grande experimentó cambios significativos que reflejaban los avances y transformaciones de la sociedad quiteña. La construcción de importantes infraestructuras, como la carretera del Sur y el Ferrocarril, impulsó el desarrollo comercial en la zona, atrayendo a nuevos residentes y negocios. A pesar de estos cambios, la esencia del barrio permaneció intacta, con la calle Rocafuerte manteniendo su encanto como un centro vibrante de actividad.

La década de los 30 marcó un hito en la historia del barrio con la instalación de la primera clínica obstétrica en la plazoleta de la Mama Cuchara. Este evento no solo mejoró la atención médica en la zona, sino que también contribuyó al desarrollo social y cultural del barrio. Las fiestas tradicionales, como la Fundación de Quito y Navidad, se convirtieron en eventos comunitarios que unían a los habitantes en celebraciones llenas de alegría y camaradería.

En los últimos años, la Loma Grande ha experimentado una revitalización cultural con la creación del Centro Cultural Mamacuchara. Este espacio se ha convertido en un importante centro de difusión artística, albergando una variedad de eventos y actividades que enriquecen la vida cultural de Quito. Agrupaciones musicales, teatrales y artísticas encuentran un hogar en este centro, contribuyendo a mantener viva la tradición y el legado del barrio.

Hoy en día, la Loma Grande sigue siendo un punto de encuentro para residentes y visitantes por igual. Sus calles empedradas y edificios históricos son testigos mudos de siglos de historia y cultura. Cada rincón del barrio cuenta una historia, desde las antiguas casonas coloniales hasta los vibrantes murales que adornan sus calles. Es un lugar donde el pasado y el presente convergen en una experiencia única, invitando a todos a sumergirse en la riqueza de su patrimonio y su identidad.

La estación de San Francisco del Metro de Quito se encuentra a 10 cuadras del sector.

Si te interesa conocer los barrios del Centro Histórico de Quito, aquí te los presentamos:

• En en centro de norte a sur econtramos los barrios: La Guaragua, Gonzáles Suarez. La Ronda y El Panecillo.
• Al occidente con las faldas del Volcán Pichincha como límite se encuentran de norte a sur: San Juan, La Merced, San Roque, La Victoria y San Diego.
• Al oriente de sur a norte, se encuentran: San Sebastián, La Loma Grande, San Marcos, La Tola, San Blas y El Dorado.