Madera noble, escuela quiteña en San Marcos

¿Qué debes saber?

• La taracea es una técnica utilizada por ebanistas expertos que heredarón los conocimientos de la Escuela de Artes y oficios de Quito, que data de la época de la Fundación de Quito.
• En el barrio de la Ronda existen otros talleres dedicados a este arte, que bien vale la pena visitar, pues facilmente podrás de ver de cerca las famosas y pequeñas esculturas de la Virgen de Legarda, que en la loma del Panecillo se produce de manera monumental.  
  • En el tradicional barrio quiteño, frente al parque de la Iglesia de San Marcos en plena calle Junín, se encuentra el taller que mantiene vivo este oficio tradicional quiteño.
  • Atiende de 09:30 a 19:00, de lunes a domingo.
  • Los visitantes, además, de adquirir artesanías únicas podrán hablar, conocer más del Centro Histórico de Quito y sabrán dónde está ubicada la ‘puerta mágica de Quito’ con don José Barrera.
  • La estación de San Francisco del Metro de Quito se encuentra a 12 cuadras del taller.

La puerta máginca de Quito

• Bienvenido al taller 'Madera Noble' en el corazón de San Marcos, un rincón mágico de Quito al que con cariño los quiteños bautizarón como "la puerta mágica".
• Ahí, justo frente a su iglesia, el artesano José Barrera Barrera da vida a la historia, la artesanía y el turismo, ofreciendo a los visitantes la oportunidad única de sumergirse en el pasado, la arquitectura y el arte de la Escuela Quiteña.
• José Barrera, un amante apasionado de Quito, ha dedicado su vida a preservar la rica herencia de su ciudad, declarada como Patrimonio de la Humanidad.
• El taller 'Madera Noble' es más que un espacio artesanal; es un viaje a través del tiempo y la identidad de Quito. Barrera, además de ser un hábil artesano, es un quiteño comprometido, creyendo que habitar y comprender la ciudad nos conecta con su espacio y su historia.
• El taller presenta una variedad de creaciones elaboradas con destreza utilizando técnicas de la Escuela Quiteña. Desde cajas y peines de cacho de toro hasta objetos tallados en tagua y porta retratos, cada pieza refleja la identidad y el orgullo de los habitantes de Quito. La taracea, una antigua técnica árabe que Barrera ha perfeccionado a lo largo de los años, implica incrustar maderas de diferentes tipos con conchiperla, hueso, carey, hilos de plata y cacho, resultando en creaciones únicas.
• José Barrera, autodidacta, sostiene un principio fundamental: cada diseño es una "pieza única". Su taller es un testimonio de la dedicación y la pasión por rescatar las tradiciones artesanales de Quito. Manteniendo un registro meticuloso de cada creación, Barrera asegura que ninguna pieza se repite, ofreciendo a los visitantes la oportunidad de poseer artesanías verdaderamente exclusivas.
• El taller 'Madera Noble' no es solo un lugar para adquirir piezas únicas, sino también un espacio donde los visitantes pueden sumergirse en la historia y las narrativas de Quito.
• Barrera, con su compromiso por la educación y el amor a la ciudad, comparte su conocimiento con aquellos que desean descubrir la "puerta mágica de Quito".

Si te gustó este oficio tradicional de los barrios orientales del Centro Histórico de Quito, recuerda que en la misma ruta puedes encontrar la Cerería Luz de America, la Tienda de Santa Catalina de Siena y el Rincón de los arcángeles

Otras rutas en el Centro Histórico

• Si te gustó este recorrido de oficios tradicionales, recuerda que desde el Arco de la Reina puedes hacer otros recorridos de oficios que exploran La Ronda, San Roque y la Calle de las 7 cruces.
• Si la caminar abrió tu apetito, recuerda que puedes hacer rutas de sabores en el Centro Histórico que exploran la Plaza de San Francisco, la Plaza Grande, San Juan, la Tola y el Itchimbia, los teatros, la calle de las siete cruces y la Ronda. Y si estás visitando Quito en Semana Santa, no te pierdas la ruta de la Fanesca quiteña.

#PichinchaEsTurismo

• Si te gustó la orfebrería, en el Distrito Metropolitano de Quito, podrás encontrar más oficios tradicionales, en los que destacan los orfebres, los ebanistas escultores, los confiteros, los ebanistas taraceadores, los restauradores y los maestros que en el presente, vigilan celosos, que la técnica quiteña, no se pierda.